NUEVA CURSO ESCUELA DE PADRES EN BURGOS

"EDUCARSE PARA EDUCAR ": Escuela de padres 

Si eres padre o madre con ganas de aprender y de compartir no dejes pasar esta oportunidad. Tus hijos serán los que más te lo agradecerán.

ALGUNOS PUNTOS CLAVES DE LA ESCUELA "EDUCARSE PARA EDUCAR"

1. Objetivos del curso:

En los padres: educar nuestra actitud y disfrutar de los hijos.

En los hijos: Conquistar su autonomía y madurez personal.

2. Contenidos: criterios, valores y técnicas educativas ( los criterios orientan a la vida, los valores le dan sentido y las técnicas hacen posible la convivencia).

3. Linea educativa: Conjugar ternura y firmeza.

4. Cualquier ayuda innecesaria es nefasta.

5. Si a tus hijos no les falta de nada, están heridos de bienestar, prepárate para curar sus heridas.

6. ¿Dónde buscar el éxito en nuestra tarea educativa? El éxito no hay que buscarlo, de entrada, en la respuesta del hijo sino en la actitud de los padres.

7. El objetivo de la educación no es que el hijo obedezca, sino que crezca y se desarrolle, es decir que acepte las normas y crezca en virtudes y valores que dan sentido.

8. Los padres deben reajustar las reacciones, no los principios, y estos deben ser mas fuertes que los caprichos del hijo.

9. La disciplina positiva propone como linea educativa conjugar ternura y firmeza, pero además:

• Aplicar las consecuencias (ir eliminando, si es posible, los premios y los castigos)
• Involucrar al hijo en la solución de los problemas. Toma de decisiones.
• Control emocional. Reconocer y aceptar sentimientos. Conexión antes que corrección

10. La misión ( la grandeza) de un educador radica en la capacidad de servir de referencia y ayuda. ( En unas circunstancias en que la mayoría optan por aparentar o desertar).

11.La mejor manera de favorecer el desarrollo integral de nuestros hijos es conocer qué son y qué necesitan, así podremos concretar los cuidados y recursos que se le debe proporcionar.

12. La libertad, seguridad y satisfacción deben estar presentes en toda relación educativa. Un niño necesita asumir la frustración, pero también necesita éxitos para su desarrollo. ¡Estar atentos a lo que hacen bien!

13. Dos pilares del crecimiento: El valor y la bondad.

. Tú eres valioso para mí, tú me interesas.

. Tú eres bueno, tú puedes hacer cosas buenas.

14.  El niño va construyendo su imagen o concepto de si mismo a partir de los gestos, palabras y trato que recibe de las personas queridas. ¡Ojo pues, a nuestras actitudes y expresiones hacia él!

15. Cuando nuestros hijos son pequeños, proteger es dar seguridad: autoridad, normas y límites, cariño, evitan que corran riesgos inútiles.

16. Cuando nuestros hijos son mayores, proteger es fundamentalmente proporcionar habilidades y recursos: Responsabilidad, autonomía, libertad, principios, valores ... para que adquieran confianza en sí mismos y acierten en sus decisiones.

17. La mejor manera de que nuestros hijos adquieran confianza en sí mismos es ofrecerles cuanto antes la oportunidad de responsabilizarse de sus decisiones y tareas.

18. Si cuando tus hijos son pequeños, tú asumes sus pequeñas responsabilidades, prepárate para asumir las grandes.

19. Componentes de la felicidad según Seligman:

• Búsqueda del PLACER (primordial pero efímero, predominante en la sociedad actual). (Vida placentera).

• Desarrollo de nuestra capacidad INTERIOR (valores, virtudes, fortalezas, para sobrellevar los momentos difíciles y adaptarnos a ellos) (Vida buena). 

•  Ponernos al servicio de algo que nos TRASCIENDA (algo que vaya más allá de nosotros mismos) (Vida con sentido). 

20. Aristóteles piensa que la felicidad no es posible sin la virtud, y ésta requiere empeño. 

21. Excesivas satisfacciones o éxitos pueden hacer que al final los hijos no quieran arriesgarse. 

22. No se puede educar desde la rabia, la sobreprotección, la culpabilidad el miedo y la pena. 

23. Cada día nuestros hijos nos ofrecen otra nueva oportunidad de ser los padres que siempre quisimos tener/ ser.

24. Los padres afectivamente maduros se distingue por estar presentes en la vida de sus hijos pero sin invadir excesivamente su intimidad. 

 25. La confianza tiene que ser un punto de partida, no una consecuencia. Teniendo en cuenta dos criterios fundamentales, que en la práctica se complementan: 

a) "El poder de lo que esperamos de la otra persona es tan grande que por sí mismo puede condicionar su comportamiento". 

b) “A la libertad desde la responsabilidad”.

26. En muchas ocasiones los problemas que surgen en la familia vienen provocados por una falta de aceptación. “Es mejor calzarse unas zapatillas que alfombrar toda la Tierra”.

27. La paciencia es una virtud activa. Nos alentará saber esperar en el resultado, pero mientras se espera hay que actuar. “La esperanza anida en la tensión entre lo que somos y lo que queremos ser”. 

28. Somos los padres los que debemos demandar al hijo autodisciplina desde los primeros años y procurar que no le sea nunca rentable será esclavizado por sus propios caprichos. "Cuando un hijo fue mal, lo sabrá por el silencio que se crea en torno a él. Perseverancia, paciencia, responsabilidad, lo aprenderá no por lo que se le dice sino por lo que ve su alrededor. "(Indios Navajos)

29. Es significativo no confundir sentimientos con comportamientos. Podemos ser permisivos con los sentimientos sin serlo con el comportamiento. A veces el niño corregirá su conducta o renunciará a lo que pide porque se siente satisfecho al ver que hemos reconocido sus sentimientos o deseos. 

30. Una forma de reconocer sus sentimientos es hacer de espejo para que los hijos vean que los hemos comprendido, sin emitir juicio alguno sobre ellos. 

31. El comportamiento del niño y su desarrollo nos son aspectos independientes. 

32. Refuerzo es todo aquello que hace que un comportamiento se repita ¡Ojo a lo que reforzamos! 

33. ¿Qué refuerza?: 

a) Prestar atención (Elogios, caricias, miradas, escucha ..., pero también regañinas, insultos, amenazas). 

b) Premios, castigos, consecuencias. 

34. Cuando uno recurre a las amenazas es porque le faltan otros recursos. En muchos casos los padres acaban siendo presos de dichas amenazas. 

35. ¿Qué puedo hacer para que mi hijo me escuche? Hablar menos. La autoridad requiere brevedad.

36. Si damos al hijo la posibilidad de opinar y resolver los problemas, su confianza en sí mismo aumenta y es más fácil que siga la decisión por él tomada, que cualquier otra adoptada por nosotros. 

37.  A veces resulta difícil establecer limites acerca de un determinado comportamiento porque no tenemos las ideas claras sobre el tema o nos cuesta enfrentarnos al mal humor del niño si le decimos que no. 

38. ¿Qué hace que un adulto razonable pierda el control? El poder o la pérdida del mismo. No entrar al trapo. Si las cosas están claras, si no son negociable, no caer en una verborrea interminable. 

39.- El problema de los castigos es que muchas veces los dictamos con un humor furioso y dolido, con cierto deseo impulsivo de venganza. En este caso rara vez sirve para cambiar el comportamiento. Los niños son fijan más en nuestro desquite y olvidan de lo que hicieron mal. 

40.- Sólo las consecuencias relacionadas con la mala acción del niño tienen sentido y son educativas. Muchas veces los padres castigamos simplemente quitando algún privilegio (tele, paga, ordenador ...) aunque no venga a cuento. En ocasiones no es fácil diferenciar entre castigo y consecuencia. Se puede decir que la consecuencia es algo lógico y predecible. Es un “castigo educativo”. 

“ENSEÑARÁS A VOLAR” 

“Enseñarás a volar, 

pero no volarán tu vuelo. 

Enseñarás a soñar, 

pero no soñarán tu sueño. 

Enseñarás a vivir, 

pero no vivirán tu vida.

Sin embargo ... 

en cada vuelo, 

en cada vida, 

en cada sueño, 

perdurará siempre la huella 

del camino enseñado."

Madre Teresa De Calcuta