En un mundo digital lleno de prisas, juicios y agresividad en las redes sociales, la educación noviolenta nos invita a otra forma de estar presentes: a escuchar antes de reaccionar, a dialogar con respeto, a transformar el conflicto sin herir y a ponernos del lado de quien sufre.
En un tiempo en el que la violencia —en sus múltiples formas— parece haberse normalizado en la sociedad, en la escuela, en internet... , este decálogo nos invita a detenernos, a mirar más hondo y a educar de otra manera. No invita a cuidar las palabras y a sembrar esperanza en medio de tanto ruido.El profesor Moises Mato ( mienbro de Encuentro y Solidaridad y del Colectivo Noviolencia) nos propone aquí diez claves para una educación verdaderamente transformadora, nacida de la experiencia, el compromiso y la esperanza. No se trata solo de evitar la violencia, sino de educar en la fuerza de la noviolencia, esa actitud activa, lúcida y creadora que busca la justicia sin destruir, que transforma sin humillar, que construye sin imponer.
A lo largo de diez breves afirmaciones, acompañadas por palabras de grandes pensadores —de Lévinas a Gandhi, de Freire a Rovirosa—, este texto nos invita a mirar la educación no como una técnica o un programa, sino como un acto profundamente humano y político: un camino de promoción, de escucha, de reconciliación y de amistad.
Cada punto del decálogo es una llamada a vivir la educación como un proceso continuo, donde todos somos aprendices y maestros, donde la noviolencia no es pasividad, sino fuerza creativa que transforma el conflicto en oportunidad y la diferencia en encuentro.
Leer este decálogo es dejarse interpelar:
¿Educamos para obedecer o para pensar?
¿Para competir o para convivir?
¿Para tener razón o para buscar juntos la verdad?
Te invitamos a leerlo despacio, a dialogarlo, a ponerlo en práctica. Cada punto es una semilla que puede florecer en el aula, en casa o en la calle.Porque educar en la noviolencia no es una opción secundaria:
es el corazón de una humanidad nueva.