martes, 20 de febrero de 2024

CURSO: EDUCAR EN LA ADOLESCENCIA




Ser padres es una tarea apasionante y en la que a veces nos tropezamos con dudas, nos vemos desbordados o necesitamos contrastar con otros el camino a seguir. Los padres también necesitamos aprender a ser padres.



Os facilitamos el curso completo: Educar en la adolescencia - Educarse para educar” , organizado por la Escuela de padres de Encuentro y Solidaridad en Burgos, Todo realizado desde la gratuidad.  Agradecemos al Carmelita Gonzalo esta edición en 6 videos y la generosidad de quienes impartieron este  curso:
Clemente Guerra y Maricarmen Sanz, educadores y padres con una amplia trayectoria en el trabajo con familias y que han acompañado a cientos de ellas en el reto de educarse para educar.

Con una gran afluencia de público, en el salón de los carmelitas rebosó un ambiente de alegría y ganas de formarse entre el centenar de padres y educadores que asistieron. Todo se ha realizado desde la gratuidad

El curso será impartido por este matrimonio  experto:

Clemente Guerra, educador e ingeniero jubilado que ejerció 32 años como profesor en el instituto politécnico Cristo Rey de Valladolid.

Maricarmen Sanz maestra de Educación infantil y orientadora familiar. 



Este matrimonio de origen burgalés lleva 40 años impartiendo este tipo de cursos y ya lo han realizado en más de 60 colegios, públicos y privados. Estos educadores enamorados de su profesión, con gran dosis de humor y humildad, intentarán a lo largo de 5 sesiones proporcionar a los padres y educadores recursos que les ayuden a corregir conductas y prevenir conflictos, así como herramientas para fomentar las fortalezas y virtudes. Se pone en marcha esta escuela con el objetivo de educar la actitud que los progenitores toman respecto a su familia y aprender a “disfrutar de los hijos” con el fin de que sean ellos quienes “conquisten su autonomía y madurez”.



El mejor regalo que podemos hacer a nuestros hijos es educarnos como padres. Es una gran alegría encontrarnos, juntarnos para formarnos, cuando todo invita a lo contrario. Vivimos en un cambio de época y el mundo es más complejo y ahora es más difícil educar. Se han perdido referencias donde anclar certezas. Los padres ahora están desbordados y angustiados al comprobar que son otros los que «educan» a sus hijos. Y ningún pueblo puede permanecer libre cuando el Estado o el mercado, con sus incontables pantallas digitales, tiene más influencia que la familia sobre el conocimiento y los valores transmitidos a los niños. 



Hoy vivimos un virus peor que el del covid-19, es el del individualismo y el egoísmo, del «sálvese quien pueda» que impide que podamos responder solidariamente a los grandes desafíos de nuestra sociedad y de la familia en particular.


Escuela de padres (1) - Curso adolescencia




Escuela de padres (2) - Curso adolescencia



Escuela de padres (3) - Curso adolescencia



Escuela de padres (4) - Curso adolescencia




Escuela de padres (5) - Curso adolescencia




Escuela de padres (6) - Curso adolescencia

domingo, 18 de febrero de 2024

CARTA VIRAL DE UN ADOLESCENTE A SUS PADRES:

"Necesito pelear, que sobreviváis a que os odie y que no os rindáis"


Los padres de adolescentes estarán comprobando cómo esta etapa de la vida es muy difícil . Sus conductas no son fáciles de llevar o entender. Y las broncas en la familia suelen ser constantes. Ni padre ni madre entienden a su hijo. No tienen como objetivo hacer "la puñeta" a sus padres sino que están buscando su norte, para lo cual necesitan que les acompañemos.

Para los padres  que estén viviendo esta etapa con sus hijos, recuperamos esta carta que la prestigiosa psicóloga Gretchen Schmelzer escribió en 2015, pero que sirve tanto para ahora como para el futuro. 

«La carta que tu adolescente no puede escribirte» es el título de esta texto escrito por ella misma como si fuera un adolescente en el que plasma el trasfondo que suelen esconder los jóvenes en esta etapa de la vida, invitando a los padres a reflexionar, entender y acompañar a sus hijos, aunque a veces cueste.




"Querido padre/madre:

Esta es la carta que quisiera poder escribirte.

En este momento estamos en una lucha. Lo necesito. Necesito esta pelea . No puedo explicarte las razones porque no tengo el idioma para ello y de todos modos no tendría sentido. Pero necesito esta pelea. Mal. Necesito odiarte ahora y necesito que sobrevivas. Necesito que sobrevivas a que te odie y que me odies a mí . Necesito esta pelea aunque también la odie. No importa de qué se trate esta vez: por la hora de volver a casa, por no haber hecho una tarea, por la lavandería, mi habitación desordenada, salir, quedarme, irme, no irme, novio, novia, no amigos, malos amigos. No importa. Necesito pelear contigo y necesito que pelees conmigo .

Necesito desesperadamente que sostengas el otro extremo de la cuerda. Aferrarme con fuerza mientras golpeo el otro extremo, mientras encuentro los asideros y los puntos de apoyo en este nuevo mundo. Solía saber quién era, quién eras, quiénes éramos . Pero en este momento no. En este momento estoy buscando mis límites y a veces solo puedo encontrarlos cuando estoy provocándote . Cuando llevo todo hasta el límite. Entonces siento que existo y por un minuto puedo respirar. Sé que anhelas el niño dulce que fui porque también anhelo a ese niño, y algo de ese anhelo es lo que me duele tanto en este momento.

Necesito esta pelea y necesito ver que no importa cuán malos o grandes sean mis sentimientos. No nos destruirán ni a ti ni a mí. Necesito que me quieras incluso en mi peor momento , incluso cuando parece que no te quiero. Necesito que te quieras a ti y a mí por los dos en este momento. Sé que apesta ser rechazado y etiquetado como el malo. Por dentro siento lo mismo, pero necesito que lo toleres y que otros adultos te ayuden. Porque yo no puedo hacerlo en este momento. Si quieres reunir a todos tus amigos adultos y tener un 'festival de ira-grupo-apoyo-para-sobrevivir-tu-adolescente', me parece bien. O hablar de mí a mis espaldas, no me importa. Solo no te rindas. No te rindas en esta pelea. Te necesito .

Esta es la pelea que me enseñará que mi sombra no es más grande que mi luz. Esta es la pelea que me enseñará que los malos sentimientos no significan el final de una relación. Esta es la pelea que me enseñará a escucharme a mí mismo, incluso cuando pueda decepcionar a otros.

Y esta lucha en particular terminará. Como cualquier tormenta, estallará. Y lo olvidaré y tú también. Y luego volverá. Y necesitaré que te aferres a la cuerda otra vez. Necesitaré esto una y otra vez durante unos años.

Sé que no hay nada satisfactorio en este trabajo para ti. Sé que probablemente nunca te lo agradeceré y ni siquiera reconoceré tu apoyo. De hecho, probablemente te criticaré por todo este arduo trabajo. Parecerá que nada de lo que hagas será suficiente. Y, sin embargo, confío completamente en tu habilidad para permanecer en esta pelea. No importa cuánto discuta. No importa cuánto me enfurruñe. No importa lo silencioso que sea.

Por favor, agárrate al otro extremo de la cuerda. Así sabré que estás haciendo el trabajo más importante que alguien podría estar haciendo por mí en este momento .

Con amor, tu adolescente".













Una versión mas reciente es esta:


¿Tienes un adolescente en casa? No tienes que explicarnos más. Quizá esta otra carta te dé las respuestas que necesites. Se ha viralizado en redes sociales hace unas semanas y hemos querido recogerla para tí, papá y mamá de adolescente.


¡Ánimo y a resistir!





"Queridos mamá y papá:

Esta es la carta que yo quisiera poder escribirte. En este momento estamos en una lucha, una lucha compuesta de peleas, silencios, reclamos… Yo necesito esta lucha. No te lo puedo explicar mejor porque no tengo palabras para hacerlo y si te lo explicase, no tendría sentido alguno; pero necesito esta lucha, la necesito desesperadamente.

Necesito odiarte ahora y necesito que tú sobrevivas a mi odio y a la rabia que te hago sentir.

Necesito esta lucha aunque la odio a ella también. No importa de qué se trate: mi hora de llegada, los deberes, la ropa sucia, mi cuarto desordenado, el móvil, el salir, el quedarme en casa, mi novio, mi novia, no tener amigos, tenerlos y que sean mala influencia.

No importa el tema, yo necesito luchar contigo y necesito que tú reacciones a ello y te enfrentes conmigo. Desesperadamente necesito que sostengas el otro lado de la cuerda, que la sostengas con fuerza mientras encuentro como sostenerme en este nuevo mundo en el que siento que estoy entrando. Antes yo sabía quien era, quien eras tú, quienes éramos “nosotros”, pero ahora no lo sé.


Ahora estoy buscando mis contornos y a veces la única forma de encontrarlos es provocándote. Cuando empujo todo lo que soy capaz, encuentro mi contorno, tropiezo con un límite y es ahí donde siento que existo y por un minuto puedo respirar.

Sé que añoras el niño(a) que fui, y a veces tu añoranza es demasiado dolorosa para mí ahora. Yo necesito esta lucha y necesito ver que no importa lo malos o grandes que sean mis sentimientos, a tí, no te van a destruir. Necesito que me quieras aun en mis peores momentos, aun cuando parece que yo no te quiera a tí. Necesito que te ames y me ames por los dos ahora. Sé que es horrible que te etiquete de malo.

Yo me siento de la misma manera por dentro, pero yo necesito que tú lo toleres y que busques la ayuda de otros adultos, porque yo no puedo ahora. Si quieres reunirte con todos tus amigos y tener una reunión “sobreviviendo a mi hijo adolescente” está bien; si necesitas hablar a mis espaldas, no me importa. Sólo no me des por perdido. No te rindas en esta lucha; la necesito.

Esta es la lucha que me enseñará que mi sombra no es más grande que mi luz. Esta lucha me enseñará que los sentimientos malos u oscuros no significan el término de una relación. Esta lucha me enseñará a escucharme, aun cuando pudiera decepcionar a los demás. Y esta lucha en particular llegará a su fin. Como cualquier tormenta, se calmará. Y yo olvidaré y tu olvidarás. Y regresaré.

Y yo necesitaré que tú tomes la cuerda de nuevo. Yo te necesitaré a ti del otro lado cuando esto termine, por muchos años. Sé que no hay satisfacción inherente en este trabajo tuyo de ser padre, y lo más seguro es que yo no te agradeceré por hacerlo o que recibas reconocimiento por mi parte.

Muy por el contrario probablemente te criticaré por todo el trabajo difícil que realizas y me parecerá que nada de lo que hagas es suficiente; y aun así cuento enteramente en tu habilidad de mantener esta lucha.

NO importa cuanto te discuta. NO importa cuanto te insulte. No importa lo silenciosa que sea esta lucha. Por favor, no sueltes el otro lado de la cuerda; no dudes que estás haciendo el trabajo más importante que alguien pudiera hacer para mí en este momento. Con amor, Tu adolescente.





viernes, 9 de febrero de 2024

DECÁLOGO PARA FORMAR UN HIJO DELINCUENTE




Decálogo redactado por la policía de Seattle. en Washington (EE.UU)  tras realizar estudios basados en su abundante experiencia en la delincuencia juvenil…  Es muy importante saber esto. Está elaborado desde la experiencia. Desde una dolorosa experiencia. 

El popular juez de menores de Granada, Emilio Calatayud,  conocido por sus sentencias ejemplares, educativas y orientadoras y, en sus charlas, hace alusión con frecuencia a éstos consejos para formar en casa un pequeño tirano. "No tenemos que ser amigos ni coleguitas de nuestros hijos porque somos sus padres y, entonces, se quedarían huérfanos." 

De manera irónica, el célebre juez  toma estos consejos y pautas acerca de todo lo que tenemos que hacer (o no hacer) para que nuestros hijos sean auténticos delincuentes en potencia (o para lograr todo lo contrario):



Decálogo para formar de tu hijo un delincuente


1. Comience desde la infancia dando a su hijo todo lo que pida. Así crecerá convencido de que el mundo entero le pertenece.


2. No se preocupe por su educación ética o espiritual. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente.


3Cuando diga palabrotas, ríaselas. Esto lo animará a hacer cosas más graciosas.


4. No le regañe ni le diga que está mal algo de lo que hace. Podría crearle complejos de culpabilidad.


5. Recoja todo lo que él deja tirado: libros, zapatos, ropa, juguetes. Así se acostumbrará a cargar la responsabilidad sobre los demás.

6. Déjele leer todo lo que caiga en sus manos. Cuide de que sus platos, cubiertos y vasos estén esterilizados, pero no de que su mente se llene de basura.


7. Riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño, así a él no le dolerá demasiado el día en que la familia, quizá por su propia conducta, quede destrozada para siempre.


8. Dele todo el dinero que quiera gastar. No vaya a sospechar que para disponer del mismo es necesario trabajar.


9. Satisfaga todos sus deseos, apetitos, comodidades y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle frustraciones.

10. Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga con sus profesores y vecinos. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que de verdad quieren fastidiarlo.

"Y cuando su hijo sea un persona antisocial y agresiva, proclamad que nunca pudisteis hacer nada `por él"


El juez Emilio Calatayud  los comenta en esta charla:





sábado, 3 de febrero de 2024

CÓMO ABRAZAR A UN ERIZO: 12 CLAVES PARA CONECTAR CON LOS ADOLESCENTES.


Una obra orientada a cualquier persona que quiera construir una relación positiva con adolescentes. .

Los autores se centran en tres áreas principales: la comunicación eficaz, la toma de decisiones y los métodos para fortalecer la autoestima en adolescentes. . Expone situaciones reales en las que se verán reflejados tanto padres como hijos. 

Igual que los erizos utilizan púas para protegerse, los adolescentes cuentan con sus propias defensas -un atuendo agresivo, una actitud provocadora- para preservar una identidad aún incipiente. Sin embargo, aunque a veces parezca lo contrario, los adolescentes necesitan y agradecen unas relaciones amorosas y positivas con sus padres y otros adultos de su entorno. 

¿Cómo descifrar sus códigos y vencer sus barreras?
¿Cómo ganarnos su confianza y mantener los canales abiertos? 
En suma, ¿cómo abrazarlos a pesar de los pinchos? 


Con deliciosas historias y doce principios pensados para fomentar la comunicación, la confianza y la autoestima de nuestros hijos, Brad Wilcox y Jerrick Robbins han creado un manual que explora los grandes temas de la educación adolescente: desde pistas para interpretar sus emociones o ideas para poner límites hasta sugerencias para hablar de sexo o para abordar temas como el alcohol, el tabaco y demás. Además, cada capítulo incluye propuestas concretas para abrir puertas, derribar muros y vencer miedos. La clave, afirman los autores, está en aprender cada día y crecer con ellos, aunque a veces sus pinchos nos frustren o nos duelan.


Índice del libro:

Mejorar la Comunicación
Escuche su llanto
Derribando el muro
Disfrute de las conversaciones a la hora de la cena
Ponga límites

Superar la adversidad
Hable acerca de lo que significa hacerse mayor y de sexualidad
Enfrentarse a su peor miedo
Recuerde lo que no pone en las etiquetas de advertencia
Aprendiendo de los errores

Trabajar la autoestima
Reconocer la propia valía
Ayude a los adolescentes a desarrollar una buena imagen de sí mismos
¡Actúe, no reaccione!
Pensando en la amistad

Autores: Brad Wilcox y Jerrick Robbins. Editorial: Urano

----------------------------------------------------------------------------

Libro   CÓMO ABRAZAR A UN ERIZO en formato pdf

-----------------------------------------------------------------------------



CURSO: EDUCAR EN LA ADOLESCENCIA

Ser padres es una tarea apasionante y en la que a veces nos tropezamos con dudas, nos vemos desbordados o necesitamos contrastar con otros e...